diumenge, de maig 26, 2013

Cec, però lliure



A lo largo de este proceso pasará de ser un hombre libre pero ciego a ser un hombre ciego pero libre. Y creo que esta es la gran enseñanza de uno de los mitos más poderosos que hemos heredado. 

(...) Pero la verdadera grandeza de edipo tiene lugar después, cuando empieza a aventurarse en su propia ingorancia y tiene el coraje de llegar hasta el fondo de su precipicio. Es entonces cuando lo que era destino, una consecuencia de lo que viene dado, deviene libertad. Edipo pasa, a través del dolor y la dignidad, de ser elegido por el azar a tener el poder de elegir, aun a costa de incurrir en la desgracia.

Rafael Argullol, "Edipo sin complejo" (fragment), a "Babelia", El País, 25.5.2013.
Foto: “Èdip i l'Esfinx”, Gustave Moreau (1864)