diumenge, de juny 17, 2012

Alegria abandonada


De todos los sumideros de la naturaleza dejados de la mano de Dios, creo que los más angustiosos son sitios como este estrado, que se concibieron para ser alegres y hoy están abandonados. Comprendo que a un hombre morboso puedan entrarle ganas de matar a un rival influido por la soledad e ironía de semejante decorado.

G.K. Chesterton, Los relatos del Padre Brown, trad. M. Temprano, Ed. Acantilado, Barcelona, 2008, p. 435. Foto, d'aquest bloc.